El proyecto soviético (de destrucción de la clase media)

En la foto se observa a parte del "Comando Evita", realizando el saludo Nazi, durante un acto en el Obelisco contra Mauricio Macri del 24 de septiembre de 2019.

"La sociedad ha mostrado una apatía sin límites..."
Estás palabras pertenecen a Anna Politkovskaya, periodista rusa, autora del libro "La Rusia de Putin", un texto muy crítico del régimen. Anna fue asesinada en su departamento el siete de octubre de 2006, el día del cumpleaños de Putin. No le robaron nada. Hacía poco que habían intentado envenenarla en un vuelo civil.
Su asesinato fue denunciado en el extranjero por un ex servicio secreto: Aleksandr Litvinenko, quien investigó al crimen organizado ruso, y llegó hasta el poder político. Murió envenenado en Londres.
Luego de la caída del muro, muchos empresarios occidentales viajaron a Rusia a realizar inversiones. Terminaron huyendo ante las presiones de los funcionarios. Les exigían coimas de hasta el 50%. No sé a qué me hace acordar.

En 2010, luego del velorio público de Néstor Kirchner, trescientas personas se plantaron en la puerta de Radio Continental al grito de "que suene el tamboril, Fernando Bravo y Leuco se tienen que morir".
En 2011, se organizó en plaza de Mayo un escrache a empresarios y periodistas que consistió en llevar a chicos a escupir fotos de figuras como Mirtha Legrand, Franco Macri, y Mauro Viale, entre otros.

Todas las formas de totalitarismo confluyen en lo mismo. No importa si comenzamos copiando al nacionalsocialismo alemán de la década del 30', o en el transcurso de la dinámica política nos pasamos al modelo soviético de una Nomenclatura millonaria que se queda en el poder para siempre.

 El partido totalitario nacional, de origen Nazifascista,(llamado localmente "Peronismo", y que a veces se presenta a elecciones como "Justicialista") lleva adelante su proyecto de destrucción de la clase media. No toda. Van por la franja de ese sector social que no se quiere someter al Nuevo Orden Posplandemia. En principio la Plandemia facilitó los primeros pasos del proyecto. Metió de un solo puntapié a todos los ciudadanos adentro. Por lo menos a los más responsables con sus vidas y las ajenas. El Covid 19 enferma dos veces. Le pega en los pulmones al contagiado y paraliza de terror a los familiares y allegados. Ese primer tramo fue sencillo. Los "chetos" bajaban en Ezeiza y traían la peste. Ahí tenían a los culpables. Para el gobierno era una ampliación de la grieta que resultaba barata y simple de comunicar.
El segundo tramo se complicó. Al empezar la debacle económica hubo que mantener a los "rebeldes" en sus casas a punta de "curva ascendente' y calcular que el pico "llegaría en mayo/junio". Todavía no sucedió. Y qué pasó durante ese extenso tramo esperando "el pico"?
Mientras se incautaban autos de los sin permiso se soltaban presos de todo tipo de peligrosidad. Varios de ellos ya han protagonizado hechos de violencia a pocos días de ser liberados.
Algo así como una milicia paramilitar para mantener al resto de la población en estado de sitio. Salir de noche, con o sin permiso, es como vivir en Alemania Oriental en los 70'.
Varios de estos liberados son integrantes de barras de clubes conocidos. De hecho los invasores de la casa del jubilado justiciero son integrantes de la de Quilmes. Parte de la facción que respondía a Hannibal Fernández participó del hecho. Pero por supuesto la política no se hace cargo. La intendente Mayra Mendoza solo se dedica a pulir sus tatuajes mientras los habitantes quilmeños se tienen que mudar, corridos por los familiares de los delincuentes, hasta que no quede nadie para defender el barrio.
Sergio Alejandro Berni consigue financiación extranjera para filmar sus spot de campaña. Pero llega tarde y los muertos y golpeados siguen. Forma parte del mismo gobierno que presiona a la justicia para liberar a homicidas y secuestradores. Cristina Fernández crítica la represión contra manifestantes que arrojaron bombas Molotov en las calles de Buenos Aires. Todavía haciendo cargo a la Gendarmería de la muerte de Maldonado, al mismo tiempo mencionan a los gendarmes como los más profesionales e idóneos, y los mandan a poner el pecho al conurbano, descuidando las fronteras, dónde la droga y el contrabando están de fiesta.
Otro doble discurso para enloquecer a la población. La ministra Frederic vuelve con la teoría de culpar al periodismo por la divulgación de las noticias sobre inseguridad. La culpa es de los que hablan del problema. No de los que lo ocasionan.
En cuanto a la deserción escolar, tanto adolescente que abandona la poca instrucción que recibe, solo le abre la puerta a ser reclutado por los punteros narcos o la extrema izquierda o la extrema derecha. Tanto La Cámpora, cómo nuevos grupusculos antisemitas se nutren de estos pibes. 
La clase media que no factura, por tener sus negocios cerrados, o haber perdido su empleo, le vende los dólares ahorrados a los sectores más acomodados. O tal vez al enorme sector social que es empleado del Estado. Por ejemplo la Gestapo impositiva(AFIP), que tiene empleados de categorías bajas cobrando arriba de los cien mil pesos, mientras están en sus casas mirando Netflix, comprando tus dólares por delivery, esperando que termine la cuarentena para perseguirte por tus deudas fiscales.
Entre ataques a silobolsas, reforma judicial, ampliación de la corte, patrullaje cibernético, presión a medios de comunicación, zancadillas a Rodríguez Larreta, muertes de ex secretarios, liberación de exfuncionarios detenidos por corrupción, corralito de dólares, pseudo mapuches quemando propiedades privadas en la Patagonia, y la huida de empresas extranjeras, el gobierno neomontonero inicia la fase final de exterminio de la clase media.
PD: tardaron 6 meses en terminar pagando lo que los acreedores extranjeros querían. Perdimos tiempo y dólares. El empleado del Papa, Martin Guzmán, cumplió su objetivo. Dejó lo peor para 2023, cuando otro signo político asome la cabeza en la carrera por la presidencia.
PDll: dónde están los valientes de la mesa contra el hambre, tipo Marcelo Tinelli, el huidizo conductor rumbo al sur, no puso ni el mantel. Y Juan Carr, antes de las PASO, juntaba pobres sin techo con pala para cubrirlos del frío.
Este invierno parece que no hay frío, ni pobres, ni falta de techo.
PDlll: se están intrusando viviendas en la costa. No hay represión policial. Pero si vos querés ir a ver qué pasa con tu propiedad asaltada el Estado no te deja pasar.

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